domingo, 19 de febrero de 2012

Nadie elige su destino


 

El mar.
Que viene, que va, que nunca para, incansable. Sin destino ni dolor.
¿Qué es el mar? Agua. Muchísimas gotas pero unidas, juntas.
Ahora intenta coger una. Separarla de las demás. Intenta adoptarla, arrancarla, apartarla. Libérala, hazla tuya, mantenla viva.
¿Puedes? Esa soy yo. Soy una entre millones. Soy diferente, única y deformable. Cambio de humor al igual que de sentimientos. Me pongo mascaras y hago el ridículo. Tengo miedo y me aparto. Eso es lo unico que me diferencia de las gotas, que la que me aparto soy yo, y a las gotas las apartan.
Ellas no tiene un cerebro para decidir, pero yo si. Yo corro riesgos, una gotita es arrastrada, es pequeña, indefensa, se desace. Pero las dos desapareceremos en algun momento u otro. En realidad todo desaparece. Pum. Se va. Ella no se despide, pero yo quizás si lo haga.
Una gota. Nadie se para a observar una gota. La gente chapotea con ellas, con muchas juntas. Y eso es en realidad lo que hace el mundo con nosotros. Se ríe. Juega como si fuéramos marionetas. primero nos utiliza y luego nos da vidas limitadas. Y nosotros guardamos como secreto lo mal que mantenemos el mundo. Una gota de lluvia. Perdida.Que cae, despacio. Que se deja llevar porque es lo unico que puede hacer antes de unirse con otras muchas que tampoco tuvieron elección. Pero todas se trasforman en un ejercito. En algo fuerte. Son un equipo, son una ola.
La gente no le da importancia a una sola gota ,pero...¡Señoras y señores! Una simple gota es indispensable. Una menos,es un recuerdo no vivido, una playa menos que inundar y una nube menos que alimentar. Una gota menos es soledad.
¿Pero a donde van las gotas al deshacerse?, ¿Al derretirse?, ¿Al desaparecer? Chorrean. Son agua, liquido. Clic clic clic...Como gente andando por la calle. Pasos. Gente acelerada, con tantas cosas en la cabeza que no se acuerdan ni de quienes son. ¿Tan difícil es parar un segundo y mirar donde estamos? ¡Una gota no puede ver! Abramos los ojos, apreciemos el suelo en el que pisamos.
Las demás gotas con las que nos cruzamos. Las nubes. El cielo. ¿Donde empieza el cielo? ¿Y donde acaba? Cuando una gota muere, desaparece. Pero otra cae o es formada.y empieza de nuevo su trayectoria. Sin elegir su camino, sin derecho a opción.
Igual que nosotros, que nacemos y morimos.
Pero nadie elige morir, ni tampoco haber nacido.

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